Los platillos que no te puedes perder
Buñuelos
Masa de harina en forma de pequeñas bolas fritas en abundante aceite.
Lengua en salsa
Suculenta lengua de res en salsa de cilantro y tomillo.
Macana
Natilla preparada con leche, huevo, galletas y azúcar.
Mistela
Dulce y refrescante bebida hecha a base de aguardiente.
El legado culinario de Manizales consiste en platillos conformados de frutos locales, al formar parte de la región cafetalera de Colombia su gastronomía ha sido fuertemente influenciada por la cocina antioqueña.
Entre los platillos que no deben dejarse pasar en Manizales, está el asorrete, un suculento pastel de carne de res con tocino, y la lengua de res en salsa de cilantro y tomillo, para aquellos temerarios viajeros que deseen aventurarse a probar algo diferente. Estos dos platillos pueden acompañarse con las tradicionales arepas, panecillos de maíz rellenos de queso.
Para endulzar el paladar después de una exquisita comida, no pueden faltar los postres tradicionales como la macana, una natilla preparada con leche, huevo, galletas y azúcar; los crujientes buñuelos colombianos, el arequipe (también conocido como dulce de leche) o la típica crema de café.
Las bebidas no se quedan atrás, en Manizales se acostumbra tomar la mistela, una dulce y refrescante bebida hecha a base de aguardiente, almíbar, manzanilla y
mejorana. Para quienes prefieren algo sin alcohol no se pueden perder la saludable aguapanelita, un tipo de té colombiano hecho de caña de azúcar.
Estas delicias pueden disfrutarse en restaurantes típicos como La Parrilla y La Fogata. Para una experiencia simplemente inolvidable visita El Portal de Fátima y El Pilón.